Un repaso por la vida de la actriz francesa La gran Catherine Deneuve: patrimonio cultural. "Todos los franceses conocemos a Catherine Deneuve, forma parte de nuestros patrimonio cultural", afirma rotunda Inès de la Fressange. La modelo, diseñadora y consultora de moda rinde en exclusiva para Vogue un sentido y personal homenaje a la actriz en el nuevo número de septiembre -ya en tu quiosco-. Que además viene acompañado de una bellísima e inspiradora editorial de moda -realizada por Bárbara Baumel y con fotos de Vincent Peters- que nos devuelve a la Deneuve más sexy y sofisticada. La gran Catherine Deneuve: infancia. Los padres de Deneuve, Renée y Maurice Dorléac, eran actores y ambos contagiaron su pasión a dos de su hijas -eran tres hermanas-. Catherine escogió el apellido de su madre para diferenciarse de su otra hermana, la trágicamente desaparecida Françoise Dorléac (derecha). Ambas actuaron juntas en la película Les Demoiselles de Rochefort, en 1967. La gran Catherine Deneuve: Roger Vadim. A los 18, Deneuve comenzó una relación con el director Roger Vadim después de trabajar juntos en la película, El Vicio y la Virtud(1963). Deneuve siempre ha dicho que el director francés fue uno de sus grandes mentores. La gran Catherine Deneuve: chic francés. "Catherine es la perfecta representación del chic francés: es lo intemporal sin aburrimiento. La perfección. Ella posee un tipo de belleza universal que trasciende generaciones. Encarna el concepto de 'mujer' con mayúsculas. Su inteligencia y todas las decisiones que ha ido tomando a lo largo de su vida, unidas a esa belleza de nacimiento, han multiplicado sus posibilidades", describe, desde las más profunda admiración, Inès de la Fressange, en el nuevo número de Vogue. La gran Catherine Deneuve: melena rubia. Catherine Deneuve es castaña de nacimiento, pero casi en el mismo momento en el que comenzó a ser conocida como actriz cambió de color su salvaje melena. Así nació y ya quedó para siempre la Deneuve de cabello dorado que todos conocemos. ¿Quieres sacarte el mejor partido? No te pierdas este tutorial con los mejores consejos para maquillarte si tu cabello es rubio. La gran Catherine Deneuve: Los paraguas de Cherburgo. Con solo 20 años, en 1963, tuvo a su primer hijo, fruto de su relación con el director Roger Vadim. Al año siguiente llegó su primer éxito en taquilla, el musical Los Paraguas de Cherburgo, de Jaques Demy. La gran Catherine Deneuve: Repulsión. Aunque quizá la película que más consiguió entusiasmar a la crítica fue Repulsión (1965), el segundo largo de Roman Polanski, protagonizado por Deneuve. En ella encarna a una mujer perturbada que siente auténtico terror y asco por los hombres. En la imagen, Catherine Deneuve asistiendo a la premier de la cinta con un espectacular vestido negro. La gran Catherine Deneuve: películas. "Todos los franceses conocemos a Catherine Deneuve", explica Inès de la Fressange. "Forma parte de nuestro patrimonio cultural, pero si tuviera que quedarme sólo con una de sus muchas películas elegiría Mi Hombre es un Salvaje, de Jean Paul Rappenau (1975). Está sublime en ese filme, representa tan bien la femme fatale, la mujer niña, la mujer salvaje y distinguida, la mujer divertida y conmovedora. En definitiva, todas las contradicciones que todas las mujeres llevamos dentro ". En la imagen, la actriz francesa asistiendo al Festival de Cine de Cannes en 1966, con un sublime vestido columna de rayas horizontales. La gran Catherine Deneuve: David Bailey. Lo suyo con el legendario fotógrafo David Bailey fue un flechazo. El mismo año que se conocieron decidieron casarse : Deneuve tenía entonces 22 años y Bailey, 21. En la imagen, el momento justo después de contraer matrimonio en Londres, un 18 de agosto de 1965. La gran Catherine Deneuve: Belle de Jour. Deneuve fue una de las grandes musas del cineasta aragonés Luis Buñuel, quien escribio sobre ella: "Es bella como la Muerte, y fría como la Virtud". La actriz francesa trabajó con Buñuel en dos de su grandes y más importantes películas, Belle de Jour y Tristana. En la imagen, Catherine y Pierre Clements, en un fotograma de la película Belle de Jour (1967). La gran Catherine Deneuve: Yves Saint Laurent. "Solía verla en los desfiles de Yves Saint Laurent, siempre tan luminosa...", recuerda Inès de la Fressange. Y es que si hubo un hombre realmente importante a lo largo de toda la vida de Deneuve, ese fue Yves Saint Laurent. Después de hacerse amigos gracias a la película de Buñuel Belle de Jour, colaboraron en muchas otras cintas, para las que el diseñador preparaba el vestuario: La Chamade (1968), Mississippi Mermaid (1968) y Liza (1972). Ambos se tenían una gran admiración y respeto y Saint Laurent la ha descrito en más de una ocasión como su "gran y absoluta musa". La gran Catherine Deneuve: personalidad. "La primera vez que nos encontramos cara a cara me dejó pasmada con su amabilidad y con su humor. Os puedo asegurar que está a la altura de lo que uno se imagina, ¡sólo que resulta incluso más simpática! Y además es tan popular y tan célebre que es imposible no reconocer su voz nada más oírla", argumenta De la Fressange en Vogue. La gran Catherine Deneuve: Distancias cortas. Todos los que la conocen aseguran que gana en las distancias cortas, e Inès de la Fressange también lo ratifica. "Catherine tiene un facultad increíble de adaptarse inmediatamente a las circunstancias. La he visto llegar a un desayuno de Roger Vivier- Inès es embajadora de la firma desde 2002- en el que no conocía a nadie, y observar como al final del encuentro estaba cantando y charlando con todos los presentes y con la mayor sencillez. Todo el mundo se sorprende mucho al conocerla. ¡Quedan completamente hechizados por su encanto!". La gran Catherine Deneuve: Marcelo Mastroiani. Deneuve se separó de Bailey en 1970 y se enamoró del director de cine Marcello Mastroiani en el rodaje de Ça n'arrive pas qu'aux autres (1971). Un año después nació su hija, la bella Chiara Mastroiani, quien ha seguido los pasos de su madre y también es actriz. ===== La gran Catherine Deneuve: la moda. "La última vez que nos encontramos fue con motivo de una entrevista que le hice para un libro sobre moda. Me sorprendió enormemente constatar lo mucho que sabe sobre este tema y lo mucho que ama la ropa ", asegura Inès de la Fressange. La gran Catherine Deneuve: David Bowie. Deneuve nunca estuvo interesada en Hollywood pero sí trabajó en algunas películas americanas, incluida la del recientemente fallecido director Tony Scott, El Ansia (1983). En ella, Dovid Bowie y Catherine Deneuve encarnaban a elegantes vampiros -vestidos de Yves Saint Laurent, por supuesto-. La gran Catherine Deneuve: Bolso. "Recuerdo que un día me confesó que no acababa de encontrar el bolso perfecto. Entonces le sugerí que se 'inventara' uno... Algunos días más tarde organicé una jornada de trabajo en la que Catherine se desveló como una persona muy seria, muy competente y muy dotada. El resultado fue que terminé fabricando ese bolso que, todo hay que decirlo, obtuvo muchísimo éxito, por mucho que nadie supiera que era la propia Catherine la que lo había 'imaginado'...", desvela divertida Inès de la Fressange. En la imagen, Julie Christie, Ursula Andress y Catherine Deneuve asistiendo al estreno de Born Free, del director James Hill, en Londres en 1966. La gran Catherine Deneuve: diosa terrenal. "Si tuviera que definir a Catherine Deneuve en sólo dos palabras sería muy sencillo, simplemente: diosa terrenal ", culmina Inès de la Fressange en el número de septiembre de Vogue, disponible desde ya en tu quiosco.