Consejos para decorar tu piso compartido sin dejarte los ahorros

Decorar un piso compartido puede ser una experiencia emocionante y una forma de hacerlo sentir más acogedor y personalizado. Pero, si además lo haces sin gastarte todos tus ahorros, tendrás la oportunidad de expresar tu estilo y personalidad, además de crear un ambiente agradable y propicio para la convivencia, ahorrando dinero al optar por opciones económicas y creativas. 

Si estás buscando ideas para decorar tu piso compartido sin gastar una fortuna, este es tu sitio.

Decorar un piso compartido puede presentar algunos desafíos adicionales en comparación con decorar un espacio personal. Por ejemplo, en referencia con la diferencia de gustos y estilos, el presupuesto o el limitado espacio. 

Para superar estos y otros problemas, es recomendable tener una comunicación abierta y honesta con tus compañeros de piso. Establecer reglas claras y respetar los límites de cada persona, puede ayudar a evitar conflictos y garantizar que todos se sientan cómodos en el espacio compartido.

Elige colores neutros y versátiles

Buscar soluciones de decoración que sean neutrales, versátiles y adaptables a los diferentes gustos y estilos puede ser una excelente opción para llegar a un acuerdo común. Normalmente, los colores neutros suelen ser del agrado de todos, por lo que podéis utilizarlos en paredes, muebles y decoración en general.

Son más fáciles de combinar y se adaptan a los diferentes criterios. Los tonos como el blanco, beige o gris claro son excelentes opciones. Así que, salvo que todos seáis amantes de los colores flúor u os guste arriesgaros con colores vistosos, centraos en los colores equilibrados.

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Consigue muebles prácticos y funcionales

La practicidad es algo que debes buscar a la hora de decorar tu casa compartida. Optar por muebles que sean prácticos y funcionales, es un requisito indispensable para conseguir maximizar el uso del espacio y buscar soluciones de almacenamiento inteligentes para evitar que el espacio se vea desordenado.

Puedes elegir muebles modulares o multifuncionales que permitan almacenar cosas y aprovechar al máximo cada rincón.

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Conserva la privacidad y las zonas personales

Es importante que cada uno conserve su parcela de privacidad, por lo que podría ser buena idea reservar espacios específicos para cada uno de los compañeros de piso, donde puedan agregar elementos personales y reflejar su estilo individual.

Como ejemplo, puede ser una estantería, un escritorio, unas baldas o incluso decoración con fotografías e ilustraciones artísticas.

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Las plantas siempre son motivo de alegría

Las plantas son una excelente forma de agregar vida y frescura a cualquier espacio. Considera incorporar plantas de interior que sean fáciles de cuidar y que no requieran demasiado mantenimiento.

Además, los elementos naturales como ramas, piedras o conchas pueden ser usados como decoración. También puedes aprovechar el espacio que tengas en la zona exterior de la vivienda para colocar aquellas flores que más os gusten.

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No dejes de lado la personalización sutil

Puedes añadir toques personales sutiles a través de cojines, cortinas, cuadros o pequeños objetos decorativos que reflejen los gustos de cada compañero de piso.

Esto ayudará a que cada uno se sienta más a gusto en el espacio compartido. Por ejemplo, podéis haceros con unos estantes de madera y colocar cada uno, un objeto que os identifique.

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Consejo extra: aprovecha las paredes de las estancias

Utiliza estanterías flotantes, estantes y organizadores de pared para aprovechar el espacio vertical y mantener los suelos despejados. Asegurarse de que cada uno tenga áreas designadas para su uso personal, puede ser un desafío en términos de diseño y distribución del espacio.

Podéis utilizarlos para exhibir objetos decorativos, libros y elementos de almacenamiento.

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En definitiva, cuando varias personas comparten un espacio, es probable que surjan diferentes preferencias respecto a la decoración. Puede ser difícil llegar a un consenso sobre el estilo, los colores y los muebles que se utilizarán. Para solventarlos, resulta fundamental tener conversaciones abiertas y comprometerse para encontrar soluciones que satisfagan a todos.